Conservas Juanjo de Santoña el mar del Cantábrico

P. 280G ANCHOAS JUANJO

La pandereta de anchoas de Juanjo en formato de 280g es un verdadero manjar del mar. Preparada con anchoas GRANDES de máxima calidad, capturadas en aguas del Cantábrico y elaboradas de forma artesanal, esta delicia es conocida por su sabor excepcional y su textura delicada. Cada pandereta es cuidadosamente preparada para preservar el sabor auténtico de las anchoas, que se conservan en aceite de oliva de primera calidad. Ya sea como aperitivo o ingrediente en tus platos favoritos, estas anchoas te transportarán a la costa del Cantábrico en cada bocado. ¡Compra ahora y descubre por qué Juanjo es sinónimo de calidad y tradición!"

  • Ingredientes: Filetes grandes anchoas(50/55 uds. aprox), aceite oliva y sal
  • Formato: lata + estuche
  • Peso Neto: 280 gr.
  • Peso Escurrido: 200 gr.      
  • Caducidad: 9 meses.

Semiconserva; conservar entre 5º y 12º, una vez abierto en refrigeración, y consumir antes de 7 días.

34,00 €

  • disponible
  • Tiempo de envío 3 - 5 días

Características de la Pandereta de Anchoas Juanjo

Nuestra pandereta de anchoas Juanjo se distingue por su calidad insuperable y proceso de elaboración tradicional. Algunas de sus características destacadas incluyen:

Anchoas del Cantábrico: Seleccionamos anchoas capturadas en aguas del Cantábrico, famosas por su sabor y calidad.

Elaboración Artesanal: Cada pandereta se prepara a mano siguiendo métodos artesanales que preservan el sabor auténtico.

Aceite de Oliva Extra Virgen: Conservamos las anchoas en aceite de oliva extra virgen para realzar su sabor y mantener su frescura.

Formato de 280g: Ideal para compartir o para los amantes de las anchoas que desean disfrutar de esta exquisitez en cantidad.

Instrucciones de Almacenamiento

Para garantizar la máxima frescura y sabor de tu pandereta de anchoas Juanjo, te recomendamos seguir estas instrucciones de almacenamiento:

  • Almacenar en un lugar fresco y seco.
  • Mantener alejado de la luz directa del sol.
  • Una vez abierto, refrigerar y consumir en un plazo razonable para mantener la calidad óptima.
  • Asegurarse de que la tapa esté bien cerrada después de su uso